Hay luz en la despedida del sol, una que no lastima, que abraza

Hay luz en la despedida del sol, una que no lastima, que abraza el horizonte y nos enseña a dejar ir sin miedo.
La luz del atardecer tiene una suavidad única, como una caricia tranquila que nos invita a soltar lo que ya pasó. En su despedida, no hay tristeza, solo aceptación. El sol se va con elegancia, dejándonos una enseñanza profunda: dejar ir no es perder, es abrir espacio para lo nuevo. 🌅