En la quietud nocturna, el tiempo parece escurriéndose

En la quietud nocturna, el tiempo parece escurriéndose entre los dedos, dándonos el espacio que el día no ofreció.
En la quietud de la noche, el tiempo se desvanece lentamente, permitiendo que el alma respire y se recupere. Lo que el día apresurado no brindó, la noche lo ofrece en silencio: una pausa para reflexionar, para sentir, para ser sin prisas, donde todo encuentra su lugar. 🌙